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Para comenzar con seriedad los resultados de las encuestas políticas que se realizan en la República Dominicana, no solamente no responden a la idiosincrasia y al perfil de hoy del dominicano, sino que desmienten esas características.

De conformidad con lo que acordamos los dominicanos a nivel nacional el 1ro. de junio de 1961, veinticuatro horas después de ser ultimado el sátrapa Rafael L. Trujillo Molina, decidimos ser tremendísimamente apasionados y tremendísimamente politizados. En consecuencia para nosotros una cosa es lo más grande del mundo, o lo peor del mundo. Nuestra valoración de lo que sea no tiene término medio. Un profesional es lo mejor que hay, o es una basura. Un@ artista es maravillos@, o es una tremenda porquería.

Así nos despachamos los dominicanos.

Y en ese sentido o discurrir de nuestra idiosincrasia y perfiles, desde pequeños nos aferramos a un partido político, generalmente porque nuestros padres pertenecen al mismo, y no lo dejamos aunque nos presenten pruebas de que sus dirigentes cuando están en el poder se enriquezcan ilícitamente, san mujeriegos, borrachones, etc. En estos casos miramos para otro lado o les buscamos una explicación.

Eso no opera exactamente en el cien por ciento de la población, pero así se comporta la mayoría, que es la que determina el resultado de unas elecciones.

Por todo esto no es concebible que la población dominicana se mueva como las olas del mar en asunto de preferencia política, hoy hacia un candidato y mañana hacia otro.

Pero todavía hablando con más concreción y realismo, ¡es qué del gobierno nacional como fuente de empleo viven millones, directa o indirectamente, por lo qué es de suprema importancia para los inmensos conglomerados de los principales partidos, luchar por llevar al de su preferencia al poder! Por lo que en ese sentido a nadie se le ocurre estar brincando de un lado para otro.

En los países superdesarrollados sí se dan esos movimientos, primero porque el nivel cívico de sus poblaciones, aunado a sus cimentadas economías (hasta ahora), son factores disuasivos como para llevarlas a ver en un político el destino de su vida y del país al que pertenecen; y segundo, que precisamente en base a todo esto se inclinan hoy a un candidato y mañana a otro, porque en el fondo no les importa demasiado lo que hagan, debido a que están conscientes de que siempre las cosas quedaran más o menos igual, y que el rumbo de sus vida particular dependerá de ellos mismos.

Es cierto que en RD hay alrededor de un 30% de abstencionismo electoral y un promedio de un 10% de indecisos, pero si nos abstenemos a la lógica, hay que suponer que quienes componen ese último segmento esperaran los días cercanos de los comicios para decidir su voto.

Con todo también es de sentido común suponer que de cuando en cuando uno que otro por ciento se desprenderá de los panales abstencionistas y de indecisos, para adherirse a uno que otro candidato presidencial, pero de igual forma se ha de colegir que esto ocurre a cuenta gotas, que no es asunto de paquetes, de 8%, 10%, 12% o 16%, sino tal como sucede en otras naciones, donde generalmente las diferencias fluctúan entre tres y cinco puntos porcentuales.

Sin embargo, a pesar de la condicionalidad sociológica y política del dominicano, veamos las abultadas diferencias -difícil de digerir- de las encuestas para las elecciones presidenciales de mayo de este año:

Encuestas por empresas de noviembre-diciembre de 2011.

Danilo Medina (PLD):

ASISA………………………………………………....... 53%

CENTRO EC. DEL CIBAO…………………………….. 37.8%

HAMILTON……………………… …………………… 46%

GALLUP………………………………………………... 42.6%

ZOGBY………………………………………………...  40%

Véase las grandes diferencias. Entre la de Asisa y la del CEC hay un espacio de más de 15 puntos; y entre la de la misma Asisa y la de Sogby la irregularidad es de un 13 por ciento; tal como si hubieran investigados escenarios o poblaciones de culturas distantes.

Hipólito Mejía (PRD), por igual noviembre-diciembre 2011:

ASISA………………………………………………..... 40%

CENTRO EC. DEL CIBAO………………………….... 54%

HAMILTON ………………………………................... 45%

GALLUP ……………………………………………… 47.9%

ZOGBY ………………………………………………  56%

Obsérvese la brecha de 16 puntos entre Asisa y Zogby; y entre la misma Asisa con la Gallup, casi 10 por ciento; y entre la de el CEC y Asisa, 14 grados. Lo que parecería indicar que midieron la simpatía hacia un mismo personaje de entre dos países, y no de uno de 10 millones de habitantes.

Entre enero y los días que van de febrero de este 2012, solamente tres empresas han hecho mediciones, Insight, Cid Latinoramericana y Penn, Schoen and Berland.

Veamos sus resultados por candidato.

Danilo (PLD).

INSIGHT …………………………............................... 47.9%

CID LATINOAMERICANA ……................................  42%

PENN, SCHOEN AND BERLAND.............................. 46%

En cuanto a los resultados de las investigaciones de esas compañías respecto al posicionamiento del licenciado Medina en lo que va de año, están ajustados a una proporción razonable. Sin embargo véase lo que arrojan en cuanto al ingeniero Hipólito Mejía para el mismo período:

INSIGHT …………………………………………….. 41.8%

CID LATINOAMERICANA ………………………... 50%

PENN, SCHOEN AND BERLAND…………………. 44%

Entre la de Insight y la de Penn se da una proporcionalidad aceptable, no así entre la de la misma Insight con la de la Cid Latinoamericana, pues presenta una diferencia práctica de diez puntos porcentuales.

Para subrayar la confusión que arrojan todas estas empresas encuestadoras y otras que no hay hecho investigaciones de muestreos electorales en los últimos meses, copiamos un párrafo completo de un artículo que sobre el tema publicara el reciente 25 de enero en el periódico Hoy, el economista Bernardo Vega. Este representa en el país a la Penn, Schoen and Berland.

“Las empresas que hasta ahora han puesto arriba a Medina son Asisa (3 encuestas) e Insight (2). Las que hasta ahora han colocado a Mejía por encima han sido Gallup (3), CID Latinoamérica (3), Zoghby (2), Ana María Acevedo (2), Benenson (1) y el Centro Económico del Cibao (1). Penn & Schoen dió a Hipólito arriba en mayo pero luego a Danilo arriba este enero. Hamilton hizo lo mismo en septiembre y noviembre”.

Después de los análisis expuestos, conjuntamente con lo dicho por el señor Vega en su escrito, publicado solamente con la finalidad de enumerar el trabajo de las encuestadoras, así como el de señalar los segmentos poblacionales donde supuestamente cada candidato presidencial está fuerte o débil, la conclusión evidente es que los resultados de las investigaciones en cuestión no son creíbles y que además dejan muchas interrogantes en el aire, dadas las enormes contradicciones de los datos en que se afirman.

Del pasado

Entrevista en la Gran Manzana con la congresista de origen puertorriqueño, Nydia Velazquez, para el programa Realidades por el Canal 35 de Times Waner, en el 2000. Luego en similar función y en la misma urbe con el funcionario dominicano Temístocles Montás, en la final de la década del 90.