viernes, 30 de diciembre de 2011

Nuevo programa de TV busca aclarar los hechos y las motivaciones de los mismos Recientemente fue abierto un nuevo programa televisivo de opinión en el canal Virus (20) de la ciudad de Santiago, con transmisión de 8 a 9 de la noche y de lunes a viernes. Enfoque final, que es el nombre del recién inaugurado espacio, es producido y moderado por el periodista Humberto Olivieras y el comunicador Radhamés Rodríguez. De acuerdo a lo expresado por estos profesionales, Enfoque final tiene como meta profundizar a través de análisis y entrevistas en los temas de política en sus aspectos más trascendentales, así como en la economía pública o privada que tenga que ver con las interrelaciones sociales. “O sea, expresó Olivieras, que no nos abocaremos a tratar asuntos relacionados con acciones policiales, cuales serían accidentes, delincuencia, crímenes, y en particular con el nebuloso mundo del narcotráfico, salvo en casos muy especiales”. “Y en cuanto a la economía, subrayó por otra parte Rodríguez, ahondaremos en los aspectos que de una manera u otra afecten los intereses del bienestar y progreso de la mayoría de la sociedad dominicana, sin olvidar cuestiones especiales de la producción industrial, agroindustrial, comercial, empresarial y otras”. Ambos enfatizaron que Enfoque final mantendrá un lineamiento independiente en relación con la política partidista, y en particular con las candidaturas presidenciales para las elecciones del año entrante en la República Dominicana. Radhamés Rodríguez es un especialista en mercadotécnia y en política social, con muchos años laborando tanto en empresas propias, así como desempeñando posiciones ejecutivas en entidades comerciales y de servicios comunales. Humberto Olivieras ha laborado por más de 35 años como periodista y mercadólogo tanto en la República Dominicana, como en Miami y Nueva York, Estados Unidos. En su país natal, entre otras posiciones, fue jefe de redacción del diario El Día, que en la década del ´80 se editaba en Santiago, así como en otra época director de mercadotécnia del Banco de Reservas. En la urbe neoyorquina fue editor metropolitano del periódico Noticias del Mundo, subdirector del semanario Listín USA, editor noticioso de Radio Wado y coopresentador del programa de televisión Realidades por el canal 35 de Time Warner. De este último sigue siendo director asociado y corresponsal desde la RD. Nuevo programa de TV busca aclarar los hechos y las motivaciones de los mismos Recientemente fue abierto un nuevo programa televisivo de opinión en el canal Virus (20) de la ciudad de Santiago, con transmisión de 8 a 9 de la noche y de lunes a viernes. Enfoque final, que es el nombre del recién inaugurado espacio, es producido y moderado por el periodista Humberto Olivieras y el comunicador Radhamés Rodríguez. De acuerdo a lo expresado por estos profesionales, Enfoque final tiene como meta profundizar a través de análisis y entrevistas en los temas de política en sus aspectos más trascendentales, así como en la economía pública o privada que tenga que ver con las interrelaciones sociales. “O sea, expresó Olivieras, que no nos abocaremos a tratar asuntos relacionados con acciones policiales, cuales serían accidentes, delincuencia, crímenes, y en particular con el nebuloso mundo del narcotráfico, salvo en casos muy especiales”. “Y en cuanto a la economía, subrayó por otra parte Rodríguez, ahondaremos en los aspectos que de una manera u otra afecten los intereses del bienestar y progreso de la mayoría de la sociedad dominicana, sin olvidar cuestiones especiales de la producción industrial, agroindustrial, comercial, empresarial y otras”. Ambos enfatizaron que Enfoque final mantendrá un lineamiento independiente en relación con la política partidista, y en particular con las candidaturas presidenciales para las elecciones del año entrante en la República Dominicana. Radhamés Rodríguez es un especialista en mercadotécnia y en política social, con muchos años laborando tanto en empresas propias, así como desempeñando posiciones ejecutivas en entidades comerciales y de servicios comunales. Humberto Olivieras ha laborado por más de 35 años como periodista y mercadólogo tanto en la República Dominicana, como en Miami y Nueva York, Estados Unidos. En su país natal, entre otras posiciones, fue jefe de redacción del diario El Día, que en la década del ´80 se editaba en Santiago, así como en otra época director de mercadotécnia del Banco de Reservas. En la urbe neoyorquina fue editor metropolitano del periódico Noticias del Mundo, subdirector del semanario Listín USA, editor noticioso de Radio Wado y coopresentador del programa de televisión Realidades por el canal 35 de Time Warner. De este último sigue siendo director asociado y corresponsal desde la RD.


Nuevo programa de TV busca aclarar los hechos, sus raices y  motivaciones 

Publicidad fallida y/o engañosa


Recientemente fue abierto un nuevo programa televisivo de opinión en el canal Virus (20) de la ciudad de Santiago, con transmisión de 8 a 9 de la noche y de lunes a viernes.

Enfoque final, que es el nombre del recién inaugurado espacio, es producido y moderado por el periodista Humberto Olivieras y el comunicador Radhamés Rodríguez.

De acuerdo a lo expresado por estos profesionales, Enfoque final tiene como meta profundizar a través de análisis y entrevistas en los temas de política en sus aspectos más trascendentales, así como en la economía pública o privada que tenga que ver con las interrelaciones sociales.

“O sea, expresó Olivieras, que no nos abocaremos a tratar asuntos relacionados con acciones policiales, cuales serían accidentes, delincuencia, crímenes, y en particular con el nebuloso mundo del narcotráfico, salvo en casos muy especiales”.

“Y en cuanto a la economía, subrayó por otra parte Rodríguez, ahondaremos en los aspectos que de una manera u otra afecten los intereses del bienestar y progreso de la mayoría de la sociedad dominicana, sin olvidar cuestiones especiales de la producción industrial, agroindustrial, comercial, empresarial y otras”.

Ambos enfatizaron que Enfoque final mantendrá un lineamiento independiente en relación con la política partidista, y en particular con las candidaturas presidenciales para las elecciones del año entrante en la República Dominicana.

Radhamés Rodríguez es un especialista en mercadotécnia y en política social, con muchos años laborando tanto en empresas propias, así como desempeñando posiciones ejecutivas en entidades comerciales y de servicios comunales.

Humberto Olivieras ha laborado por más de 35 años como periodista y mercadólogo tanto en la República Dominicana, como en Miami y Nueva York, Estados Unidos. En su país natal, entre otras posiciones, fue jefe de redacción del diario El Día, que en la década del ´80 se editaba en Santiago, así como en otra época director de mercadotécnia del Banco de Reservas. En la urbe neoyorquina fue editor metropolitano del periódico Noticias del Mundo, subdirector del semanario Listín USA, editor noticioso de Radio Wado y coopresentador del programa de televisión Realidades por el canal 35 de Time Warner. De este último sigue siendo director asociado y corresponsal desde la RD. La directora general del espacio lo es la periodista Zunilda Fondeur.


Publicidad fallida.

Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante.
El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida.
Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas.

 Publicidad engañosa



 En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto.









    

domingo, 25 de diciembre de 2011

Presentador vs.animado,y éste vs.payaso La publicidad fallida y/o engañosa Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y comedimiento las motivaciones de una actividad, y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias. Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas. En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser artístico, deportivo y de otras naturalezas de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por televisión. A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma. Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros. Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista. Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical. En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo, Nikauly de la Mota y otras más. Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez. Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio. Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito. Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes. Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns. Publicidad fallida. Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante. El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida. Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas. Publicidad engañosa En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto. Del pasado y el presente Asistentes a la cena de gala del Gran Desfile Dominicano de El Bronx, NY, en el 2002. Desde la Izq., Alvin Brighwater, su esposa, Julia, el presidente de la parada, Felipe Febles, el doctor Rafael Lantigua, Pedro de la Mota, nuestra persona y el empresario Agustín Martínez. Un encuentro reciente con los destacados merengueros Jovanny Polanco y Krispy. Presentador vs.animado,y éste vs.payaso La publicidad fallida y/o engañosa Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y comedimiento las motivaciones de una actividad, y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias. Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas. En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser artístico, deportivo y de otras naturalezas de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por televisión. A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma. Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros. Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista. Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical. En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo, Nikauly de la Mota y otras más. Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez. Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio. Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito. Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes. Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns. Publicidad fallida. Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante. El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida. Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas. Publicidad engañosa En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto. Del pasado y el presente Asistentes a la cena de gala del Gran Desfile Dominicano de El Bronx, NY, en el 2002. Desde la Izq., Alvin Brighwater, su esposa, Julia, el presidente de la parada, Felipe Febles, el doctor Rafael Lantigua, Pedro de la Mota, nuestra persona y el empresario Agustín Martínez. Un encuentro reciente con los destacados merengueros Jovanny Polanco y Krispy. Presentador vs.animado,y éste vs.payaso La publicidad fallida y/o engañosa Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y comedimiento las motivaciones de una actividad, y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias. Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas. En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser artístico, deportivo y de otras naturalezas de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por televisión. A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma. Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros. Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista. Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical. En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo, Nikauly de la Mota y otras más. Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez. Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio. Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito. Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes. Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns. Publicidad fallida. Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante. El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida. Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas. Publicidad engañosa En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto. Del pasado y el presente Asistentes a la cena de gala del Gran Desfile Dominicano de El Bronx, NY, en el 2002. Desde la Izq., Alvin Brighwater, su esposa, Julia, el presidente de la parada, Felipe Febles, el doctor Rafael Lantigua, Pedro de la Mota, nuestra persona y el empresario Agustín Martínez. Un encuentro reciente con los destacados merengueros Jovanny Polanco y Krispy. Presentador vs.animado,y éste vs.payaso La publicidad fallida y/o engañosa Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y comedimiento las motivaciones de una actividad, y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias. Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas. En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser artístico, deportivo y de otras naturalezas de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por televisión. A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma. Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros. Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista. Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical. En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo, Nikauly de la Mota y otras más. Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez. Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio. Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito. Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes. Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns. Publicidad fallida. Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante. 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Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto. Del pasado y el presente Asistentes a la cena de gala del Gran Desfile Dominicano de El Bronx, NY, en el 2002. Desde la Izq., Alvin Brighwater, su esposa, Julia, el presidente de la parada, Felipe Febles, el doctor Rafael Lantigua, Pedro de la Mota, nuestra persona y el empresario Agustín Martínez. Un encuentro reciente con los destacados merengueros Jovanny Polanco y Krispy. 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Espectáculo que tanto podría ser artístico, deportivo y de otras naturalezas de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por televisión. A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma. Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros. Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista. Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical. En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo, Nikauly de la Mota y otras más. Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez. Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio. Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito. Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes. Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns. Publicidad fallida. Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante. El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida. Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas. Publicidad engañosa En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto. Del pasado y el presente Asistentes a la cena de gala del Gran Desfile Dominicano de El Bronx, NY, en el 2002. Desde la Izq., Alvin Brighwater, su esposa, Julia, el presidente de la parada, Felipe Febles, el doctor Rafael Lantigua, Pedro de la Mota, nuestra persona y el empresario Agustín Martínez. Un encuentro reciente con los destacados merengueros Jovanny Polanco y Krispy.




Presentador vs.animador,y éste vs.payaso

La publicidad fallida y/o engañosa

Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y  comedimiento las motivaciones de una actividad,  y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias.

Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas.

En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser  artístico, deportivo y de otras naturalezas  de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por   televisión.

A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma.
Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros.

Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista.
Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba.

Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical.
En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo,  Nikauly de la Mota, Milagros Germán y otras más.
 
Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez.

Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio.
Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar  que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito.

Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas  de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes.
Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns.

Publicidad fallida.

Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante.
 
El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida.

Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas.

Publicidad engañosa

En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto.



Del pasado y el presente


Asistentes a la cena de gala del Gran Desfile Dominicano de El Bronx, NY, en el 2002. Desde la Izq., Alvin Brighwater, su esposa, Julia, el presidente de la parada, Felipe Febles, el doctor Rafael Lantigua, Pedro de la Mota, nuestra persona y el empresario Agustín Martínez
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Un encuentro reciente con los destacados merengueros Jovanny Polanco y Krispy.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Presentador vs.animado,y este vs.payaso Publicidad fallida o engañosa Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y comedimiento las motivaciones de una actividad, y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias. Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas. En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser artístico, deportivo y de otras naturalezas de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por televisión. A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma. Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros. Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista. Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical. En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo, Nikauly de la Mota y otras más. Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez. Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio. Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito. Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes. Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns. Publicidad fallida. Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que llame la atención, sino una cantidad de elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante. El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida. Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas. Publicidad engañosa En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto.



  • Presentad@r vs.animad@r,y éste vs.payas@
  • Publicidad fallida o engañosa

Entre las personas que hacen de la conducción de un acto público una profesión hay diferentes especialistas de conformidad con la idoneidad y el estilo con que actúen. Así hay quienes son certificados como presentadores, que son los que exaltan con destreza y  comedimiento las motivaciones de una actividad,  y a la vez introducen a las figuras y otros elementos que participen en un evento dado. El presentador es propio para actos profesionales, culturales, y también variedades artísticas. En su formato de actuación son calificados como maestr@os de ceremonias. 

Todas esas condiciones las han constituidos en sus personas Osvaldo Cepeda y Cepeda, Yaqui Núñez del Risco, Roberto Ángel Salcedo y Zunilda Fondeur (Nueva York), entre otras meritorias figuras dominicanas.
En cambio el animador es quien con desbordado entusiasmo, apasionamiento, y además con ditirambos, presenta un espectáculo y sus valores. Espectáculo que tanto podría ser  artístico, deportivo y de otras naturalezas  de diversión. Frecuentemente tales especialistas se desenvuelven en conciertos populares de música, así como en shows por   televisión.

A la vez el animador o el presentador, si posee suficiente talento, ya para el canto o el humor, entonces hasta podría ser calificado de showman. O sea la persona que trasciende la condición de conductor (lo cual implica todas las categorías mencionadas) para ser una atracción en sí misma.

Un ejemplo de esto último fue lo que constituyeron (o constituyen) un Freddy Beras Goico, Johnny Carson, Oprah Winfrey, David Letterman y otros.
Lógico, en todas estas esferas hay unos más brillantes que otros. También hay que hacer ciertos desgloses, pues no es lo mismo que un animador tenga humor, a que sea propiamente un humorista.
Jochi Santos es un extraordinario animador, pero no es un humorista. Contrario a Freddy Beras Goico, que lo era; incluso hasta cantaba. 

Julio César Matías, Luisito Martí, Felipe Polanco (Boruga), Cuquín Víctoria, Raymond Pozo, Miguel Céspedes (fueron unos, son otros) maravillosos humoristas, pero no presentadores ni animadores, aunque en algún momento de sus vidas ejercieran como tales. Incluso Luisito Martí no solamente cantó por muchos años con el combo de Johnny Ventura, sino que además tuvo su propio conjunto musical.
En Santo Domingo propiamente buenos presentadores son Jatnna Tavares, Tania Báez, Roberto Ángel Salcedo,  Nikauly de la Mota y otras más. 

Ahora, hay que cuidarse mucho de meter en un mismo saco a un animador simpático, dinámico, brillante, juntamente con un payaso, que es lo mismo que decir con un ridículo. Porque para un locutor devenir en un magnifico animador, necesita fundamentalmente capacidad, que es lo mismo que decir cultura, buena dicción y gran léxico, además de mucha chispa, sentido común y mucho talento. Y ninguna de estas cualidades pueden ser sustituidas por irrespeto, indelicadezas, vocinglerías, gesticulaciones desorbitadas y malabarismos. Por lo que cuando se incurre en esto, entonces se pasa al mundo de la payasería, de la chabacanería y de la ridiculez.

Y mucha atención con considerar que estamos desairando a los payasos, pues precisamente en gran parte su arte consiste en eso, en ser ridículos para que con sus extravagancias provocar hilaridad en el auditorio.
Esa actitud alocada, disparatada y sin miramiento alguno con que actúan muchos supuestos animadores, no tiene que ver nada con entusiasmo y pasión. Incluso llegamos más lejos al afirmar  que el animador con las autenticas herramientas de tal, no precisa de posturas desaforradas para despertar la atención, abrillantar un evento y ganar crédito.

Estas observaciones no están motivadas por prurito alguno de didactismo, aunque podrían ser tomadas como tales, sino que son conclusiones extraídas  de la vivencia diaria de la televisión dominicana y de otras partes.
Finalmente para quienes trabajan en ese último medio conduciendo programas o segmentos musicales, queremos decirles que además de los atolondrados de Guachupita, en la capital, de Cienfuegos, en Santiago, también hay televidentes informados. Que la finca no solamente está sembrada de guasábara y verdolaga, sino también de otras plantas aromáticas. Don´t foget that, clowns.

Publicidad fallida.

Este anuncio adjunto es una muestra de lo que no se debe hacerse en publicidad. Primero, no hay un llamado fuerte o atractivo que capte la atención, sino elementos dispersos, comenzando por dos ofertas que para entenderlas el lector tiene que concentrarse bastante.
El titulo grande que atrae la vista y que constituiría el seguimiento a la imagen de las mujeres, no solamente no especifica de qué se trata, sino que además hacia donde dirige el sentido común (las mujeres se planifican para no quedar embarazadas), es muy diferente de lo que en verdad quiere significar: aprender a organizarse para tener éxito financiero en la vida.
Considérese que hoy en día la gente anda con mucha aceleración por las exigencias de la supervivencia, así como por el triunfo económico y social, y que debido a todo ello no tiene tiempo para sentarse a averiguar lo que se pueda esconder en un barullo de cosas dispersas.

Publicidad engañosa

En los Estados Unidos de América y otros países de primer nivel hay leyes que castigan la publicidad engañosa, de la cual mercachifles, comerciantes y empresarios se valieron hasta hace pocas décadas para estafar al público. Productos, alimentos y medicinas, carentes de todas las condiciones con las cuales lo promocionan; aparatos que por igual no cumplen con todas las funciones que sus fabricantes anuncian; los llamados “especiales” o “liquidaciones” que no son tales, etc., etc. La noticia que mostramos es una muestra del celo y la ética con que las autoridades correspondientes actúan al respecto.

sábado, 12 de noviembre de 2011








La Salsa no ha tenido pegada en la RD,
 Contrario al son, guaracha, rock and roll, reggaeton, etc.
Celia Cruz fue rumbera, no salsera
Los dominicanos no aprenden a bailar salsa


Contrario a muchos géneros musicales extranjeros, la salsa no ha tenido pegada en la RD a pesar de la cercanía de Puerto Rico y en consecuencia la gran inmigración de dominicanos en esa isla –que debió de haber servido de un puente efectivo en ese sentido-, y a pesar de la extraordinaria difusión que ha tenido ese ritmo en toda la zona del Caribe, e inclusive en Sudamérica.

El asunto se presta a un estudio de musicólogos, pues los compases de la salsa (4x4 y 8 tiempos) tienen mucha relación con otras modalidades que en sus tiempos gozaron de grandes acogidas entre los bailadores criollos, tales como el son montuno, la guaracha, la rumba, el guaguanco, el chachachá, etc.

Y en ese último sentido se podrían citar otras categorías –además de las citadas- que concitaron muchos éxitos aquí, cuales fueron la danza, la contradanza y el danzón en las conjunturas de los siglos XIX y XX; luego el tango, la ranchera mexicana, el mambo, el rock and roll, el twist y en los últimos años el reggaeton. El jazz es otro género que, además de ser cultivado por diversas agrupaciones, ha contado con muchos seguidores, aunque en cierto nivel social, como ocurrió con algunas de las músicas citadas. Por ejemplo: el mambo se quedó limitado a los niveles altos de la sociedad, mientras que la ranchera fue por muchos años –desde un Jorge Negrete a un Vicente Fernández- toda una pasión en barrios y campos. De hecho la mayoría de las emisoras radiales transmitían todos los días por la mañana una y hasta dos horas de ese aporte azteca.


El bolero, originario de Cuba, casi no podría nombrarse como categoría extranjera por la extensa permanencia y el prohijamiento que tuvo en el país, contando con múltiples interpretes nacionales, desde solistas hasta tríos. La balada tampoco es de nuestro origen, pero el talento dominicano ha abrazado de tal manera el género, que igual de lo que pasó con el bolero, disfruta de carta de naturalización.

Empero la balada, que es un estilo melodioso y romántico, pero sin mucho ritmo y sin compases cortos, lleva el hito negativo de haber eliminar el que parejas de hombres y mujeres lo hayan aprovechado para bailarlo pegado, cachete con cachete, aspirando el perfume y el palpitar de cada quien. Entre sus principales fomentadores habría que mencionar a Alberto Vásquez, Emmanuel, José-José, Raphael, Julio Iglesias, Chucho Aveyanet, Sandro, Lisette Álvarez y Lucecita Benítez.

La salsa se incrementó en la década del ´60. El Gran Combo de Puerto Rico fue uno de sus más brillantes exponentes. El género tiene mucho de fusión con otros ritmos, tales como el son, la guaracha, el chachachá, la rumba, el guaguanco y otros. Éstas son fuentes cubanas, pero no se puede negar que los puertorriqueños fueron quienes le dieron el formato final.

Precisamente por su mezcla pentagramal es que a la salsa se le llama como tal. Su bautizo se lo dio el locutor venezolano Phidias Escalona, quien al entrevistar en Caracas a Richie Ray, le pregunta que cómo se llamaba la modalidad que él cantaba con su orquesta, y al contestarle que era una combinación de varios ritmos, aquél le dijo: “Ah, pues es como una salsa”, y de ahí le quedó el nombre a la creación. Empero por la década del ´40 ya había en Cuba una agrupación que se denominaba Conjunto los Salseros, o sea que el crecimiento dado es de vieja data. Pero asimismo hay que apuntar que cuando adviene arrolladoramente el nuevo aire, no surge ninguna orquesta cubiche que se pudiera mencionar, sino que fueron (y son) valores puertorriqueños quienes producen su explosión, tales como los que se convirtieron luego en superestrellas de la moda en cuestión: Tito Puente, Tiro Rodríguez, Ismael Rivera, Cheo Feliciano, Charlie Palmieri, Tommy Olivencia, Ray Barretto, Willie Colón, Héctor Lavoe, Eddie Palmieri, Richie Ray, Bobby Cruz, Ismael Miranda, Frankie Ruiz, y artistas de otras nacionalidades como Ruben Blades (panameño), Oscar D´Leon (venezolano), Luis Enrique (nicaragüense), y muchos más.

La archifamosa Celia Cruz, a quien se le llamó la Reyna de la Salsa, no creemos que en verdad fuera una exponente genuina de la categoría en sí misma, pues si se observa bien las composiciones que interpretó –magistralmente- mantenían sobrecargas de los otros aires afroantillanos, como los mencionados: el son, la guaracha, la rumba y el guaguanco. Mírese su último gran éxito: “Esa negra tiene melao, melao, melao”, no podría bailarse al estilo salsero.

La salsa cuenta con agrupaciones musicales y muchos seguidores en Venezuela, Colombia y en otros países de las regiones caribeña y centro y Sudamérica, pero en la República Dominicana nunca impactó en una proporción significativa. En cincuenta años en este territorio posiblemente no pasan de ocho los conjuntos de esa clase que se hayan formado y, lógicamente, también desaparecido. En la actualidad solamente se cuenta con los combos de Michell, Sexappeal y Asdrúbal, los cuales ocupan lugares secundarios en la pasión del público.

José Alberto Justiniano Andújar, mejor conocido como José Alberto (El canario), ha sido el cantante dominicano de salsa que más alto ha llegado, incluso a nivel de estrella internacional, pero este artista, además de que se desarrolló en Nueva York, tuvo a la Gran Urbe como su plaza principal, y sus desplazamientos fueron a mercados ajenos a la RD.

Es cierto que en el país se presentan figuras relevantes de la salsa como Víctor Manuelle y Gilberto Santa Rosa, pero cuando emprenden el vuelo de regreso, se apaga la luz.

Confirmación de lo subrayado en este texto es que la Asociación de Cronistas de Arte, Acroarte, dejó fuera el renglón de la salsa en la premiación del Casandra del pasado marzo, y para el próximo evento en cuestión es posible que corra la misma suerte.

Finalmente y como cosa extraña (¿o reconfirmación?), el dominicano nunca aprendió a bailar la salsa cual el clásico estilo que demanda esta, lo hacen como si fuera guaracha, son, rumba o cualquier otra cosa.

Del recuerdo:

Celebración de un aniversario -en tiempo pasado- de la Asociación de Cronistas de Espectáculos (Ace) de Nueva York. Entre otros directivos y miembros de la entidad se aprecian a su presidente, Fernando Campos, la famosa actriz Lupita Ferrer, Zunilda Fondeur, Miriam Soberón, nuestra persona y otros colegas más.





jueves, 8 de septiembre de 2011


Torturas, muertes, prostitución, pero la película es una comedia

¿Juegan con el público Jennifer y Anthony?

Artistas en decadencia se refugian en la política

En este Segundo Festival de Cine Internacional en el país, fue proyectada la película Carne de Neón, cinta con la cual se abrió el evento en Santo Domingo y en Santiago, y la que como tal recibió la mayor publicidad de entre las producciones que participaron en la muestra.
Lo curioso es que a pesar de que en la trama tienen lugar terribles torturas y asesinatos,  prostitución de la peor calaña, a nivel que mujeres indefensas por su condición de inmigrantes, incluyendo a una africana encinta de nueve meses, son obligadas a vender sus cuerpos, el director de la cinta, Paco Cabezas, la califica de comedia y con ese calificativo es promovida en el mercado.
Es cierto que se dan momentos esporádicos de hilaridad, pero las crueldades y la tanta sangre en la película los opacan. .
Es evidente que al joven director español, Paco Cabezas, en su afán de producir un gran impacto perdió el sentido de la medida en ese trabajo, recargándolo con tantas crueldades y violencia, propias de las cintas gansteriles, que de seguro lleva al espectador sensible a detestar haber asistido a la obra.
No se puede negar el gran talento de Cabezas, el cual se percibe en la estructura general de la trama y en las buenas actuaciones que saca de los actores, pero su falta de una mayor experiencia, lo lleva a sobreabundar en pasajes tremebundos en esta producción.

¿Juegan con el público Jennifer y Marc Anthony?

Después de más de un mes de Jennifer López y Marc Anthony anunciar su separación, oficialmente no se ha sabido más nada sobre el proceso correspondiente, sino comentarios sueltos al respeto de parte de cronistas  faránduleros, o sean especulaciones.
Sabedores del temperamento veleidoso y volcánico del carácter hispano, llama poderosamente la atención el silencio que ha mantenido la pareja sobre el divorcio y todo lo que ello implica (valga la reiteración); incluso algunas fuentes supuestamente cercana a los dos artistas últimamente han estado difundiendo que ellos seguirán viéndose juntos ¡pero cómo amigos comerciales! ¡Pamplinas, coñazo!
Hace cosa de un año se divulgó que la boricua había salido abruptamente de un hotel de Las Vegas, enojada por celos con Anthony, y de eso nunca más se supo nada. Pero eso sí, la aparente bronca le dio la vuelta al mundo entero, alimentando su popularidad.

Ante todo esto cabe la pregunta de si ambas situaciones no son más que tretas publicitarias de ellos para mantenerse en palpitante vigencia ante el público.
De ser así están incurriendo en un grave error, primero, porque todavía no necesitan de tales trucos, y en segundo lugar porque como la gente y los especialistas de los medios se percaten de las maniobras –en el caso que sean ciertas- , perderán credibilidad y quedarán como un par de payasos baratos.

Artistas en decadencia buscan la política

Con sus excepciones cuando los artistas buscan la política es porque están en decadencia. Esa es una buena medida para saber la caida de su popularidad. El sentido común lo indica así, pero sobre todo las experiencias conocidas. Y es que un artistas que esté gozando de popularidad, de fama, requerido constantemente  por los mercados nacionales e internacionales, y por lo tanto ganando grandes sumas de dinero, no tiene espacio de animo ni mental para pensar en candidatos politicos que posiblemente no cuenten con la acogida del público de la cual ellos disfrutan. De ahí que solamente cuando están a la deriva es que buscan un palo de donde agarrarse.

Actualmente en la RD hay dos excepciones al respecto, Héctor Acosta, El torito, la figura más cimera del país después de Juan Luis Guerra, quien es un manifiesto simpatizando del PRD, y por igual Anthony Santos, quien es un adherente abierto de  Hipolito Mejia. De los "refugiados" no vamos a describir a ninguno, ya que la idea no es desprestigiar a nadie en particular. Que juzgue cada quien.


Las pulgas son bichos necios. Causan mucha comezón cuando pican. Ah, y no respetan ni a los artistas. 
Anthony Santos (El Mayimbe) amenaza con cantar en inglés en Hard Rock Cafe, ¿pero en su condición de hispano, no debería primero aprender a hablar en español.



Del recuerdo

Gráficas de un reportaje que efectuáramos en el 2004 en Orlando, Florida.
En una con el reconocido camarógrado, Kike Hiciano, quien falleciera en Nueva York en el 2008, y en otro instante con la colega Zunilda Fondeur (centro), su hermana Belkys y el esposo de ésta, además de Kike. Zunilda y mi persona fundamos en el 1992 el programa Realidades por el Canal 35 (Time Warner) de la Gran Urbe; espacio que se mantiene en vigencia.








viernes, 19 de agosto de 2011



Marca-país vs. Institucionalidad


A Juan Bolívar Santana y a Jonathan Cabrera



Por primera vez en estos últimos meses se está debatiendo en algunos foros y en la prensa de la República Dominicana, el tema sobre la marca-país como idea que envuelva a toda la estructura nacional, y no solamente como concepto para mercadear el turismo.

Contrario a un par de artículos que se han publicado sobre el tema, creemos necesario explicar qué es lo que implica el esnobista concepto de marca-país.

A pesar de la esquemática morfología de la locución, se trata simplemente de la percepción que del país se tenga en el exterior, como fórmula para atraer inversionistas que se interesen en algún renglón de la economía, ya en la agropecuaria, ganadería, industria, manufactura, ensamblajes, tecnologías, etc., etc., así como en especial para la captación de turismo.

En ese sentido los países tratan de atraer para sí tales valores en base a las imágenes (percepciones) que de sus atracciones naturales, monumentos o estructuras de mercado, jurídica, empresarial y política, se haya fomentado en el exterior de manera espontánea o por campañas promocionales, a veces mediáticamente, y otras veces a través de ferias, foros, conferencias, seminarios, ´almuerzos ejecutivos´ y de otras múltiples maneras.

Así para potenciales inversionistas hay países que se “venden” indistintamente con una o varias de estas banderas: que es de ´manos de obra barata´, de ´regulaciones legales flexibles´, de ´instituciones serias y acrisoladas´, de ´democracia sólida´, de ´ubicación estratégica para ciertos mercados´, de ´mucha seguridad social´, de ´una población técnica y profesional apta para la producción´, de ´retorno del capital con poco encarecimiento y pocas trabas´, y así por el estilo.

Para tener una idea especifica de lo dicho, no hace demasiado tiempo que millones de capitales norteamericanos, y hay que suponer que de Europa también, fueron retirados de América Latina y el Caribe para ser colocados en China por las manos de obra barata y porque el gobierno comunista les aseguraba cero conflicto a causa de huelga, ya que como se sabe ese régimen es implacable en ese sentido. ¡Y esto, la selección, a pesar de la enorme lejanía de China en relación con los Estados Unidos y Europa, lo que supondría encarecimiento del costo de producción a causa del transporte de la mercancía! Lógico, muchas de las producciones en cuestión van a los mercados de los demás territorios de misma Asia.

Así, pues, marca-país es la idea, la imagen, el concepto, y en esencia el conocimiento que se tenga de un país dado. Importándole a cada quien de conformidad con su propósito particular, pues no es lo mismo una visita de unos días de playas, de sexo o de monumentos, que la idea de una inversión de capital.

A manera de ejemplos, ¿de dónde extraemos la marca-país de Francia? De su logo de la torre Eiffer, y su condición de ser uno de los grandes centros de la cultura y la historia del mundo con su famoso museo del Louvre, donde reposa la archifamosa pintura original de la Mona Lisa. ¿De dónde la marca-país de Argentina? De ser cuna del tango, Gardel, las bucólicas pampas, y hasta glaciales. ¿De dónde la de Italia? De las ruinas monumentales del Impero Romano, el Vaticano, Venecia, la torre de Pisa. ¿De dónde la de Inglaterra? Con su símbolo del antiquísimo reloj Big Ben, de su cultura milenaria, la Corona Real con sus conspicuas figuras y sus actos suntuosos, sus catedrales y castillos medievales. ¿De dónde la de México? De la visión de un país en llamas arrasándolo todo por los grandes crímenes del narcotráfico, salvo sus enclaves turísticos de Acapulco, Cancún y otros. ¿De dónde sintetizamos la de Puerto Rico? De la de un territorio de hermosas playas, hoteles internacionales, instituciones gubernamentales estables y de gente amable. ¿De dónde la de Colombia? De sus exclusivas esmeraldas, las más bellas flores de la región que se exportan, y del mejor café del mundo, pero además, de ser el mayor productor de narcóticos ilegales del globo y de contar con una guerrilla y paramilitares causantes de todo tipo de tragedia humana.

Un país, como producto, como factor económico ofertable, ya para visitarle, ora para invertir, no es un refresco embotellado o una caja de cereal con sabores únicos, sino que está compuesto por una cantidad de elementos a veces hasta contradictorios, pero la gente del exterior priorizan las diversas visiones que tiene del mismo en un solo componente, por lo que puede ser conceptuado como: extraordinariamente atractivo, bastante atractivo, un poco atractivo, exótico, agradable, rentable, interesante, o en cambio peligroso, arriesgado, problemático, de democracia estable o inestable, de gobierno transparente o corrupto, etc., etc.

O sea que el potencial interesado en equis país, sea como turista o capitalista, lo etiqueta por medio de una focalización conceptual, ¡y eso es lo que llamamos marca-país! ¿Capire?

Hasta el presente los entes responsables de la marcha de la República Dominicana, tanto del lado oficial como privado, de lo que más se han ocupado es de ´vender´ al país para consumo del turismo y en menor relevancia para el capital extranjero.

De ahí que en décadas pasadas lanzaran en el exterior campañas publicitarias con el eslogan de “República Dominicana, el mejor secreto guardado del Caribe”, con presentación de playas y otros paisajes; luego “Republica Dominicana, inconmensurable”, y en la actualidad “La República Dominicana: lo tiene todo”.

En ese orden el sector oficial en combinación con el empresariado de la rama, han estado proyectando al país como el mejor destino para el golf en el Caribe, para lo cual han desarrollado costosos campos de ese deporte con las más altas técnicas profesionales con la participación de célebres golfistas internacionales.

Las promociones turísticas no se han limitado del todo a la captación de vacacionistas, sino también en menor cuantía a inversionistas para ese sector, de ahí los hoteles y restaurantes de capital extranjero en Santo Domingo, el Este y en el Norte.

Ahora bien, vayamos al meollo de la razón de este artículo: ¿Cuénta la República Dominicana con condiciones, fuera de la punta turista, cómo para desarrollar una marca-país que estimule una inversión extranjera de grandes proporciones? Definitivamente creemos que no, y que avocarse a tal plan es una quimera, una falta de miras, de reflexión y hasta de sentido común. Simplemente porque antes de pretender proyectar al país como mercado internacional en ese sentido, tendría que contarse con organismos gubernamentales y estatales altamente consolidados, que sean confiables y respetados por su carácter eminentemente institucional. .

Y lamentablemente las nomenclaturas gubernamental y estatal del país no son ni nunca han sido estamentos fundamentalmente transparentes, sino que en ambas esferas las decisiones emanadas de sus centros siempre han estado marcadamente influenciadas por los puntos de vista particulares y los intereses de los titulares. Y eso ha ocurrido durante los 167 años de independencia de la nación, sin importar el partido que esté en el poder y sin importar la última constitución que haya sido aprobada.

Por todo ello consideramos que los esfuerzos del empresariado dominicano de fomentar una marca-país de la República Dominicana, deben primero ser dirigidos de manera vigorosa y sin ambajes a que el país se institucionalice, de manera que se entronice aquí la cultura del respeto a las leyes, para que los elementos oficiales y privados nos rijamos por ellas y no por las relaciones personales de conveniencia, de amigos, familiares o compañeros de partido.

En ese sentido hay una gran cantidad de tareas políticas a las cuales el empresariado dominicano, a través de los consejos que lo representa, debería abocarse a trabajar con las mangas remangadas, abandonando la práctica de reclamaciones esporádicas y tibias que de cuando en cuando emiten.

Aspirar a una sociedad a lo Suiza es ilusionismo, pero trabajar con honestidad por una sociedad donde los aparatos gubernamental y estatal respeten y hagan respetar las leyes, sí es posible. ¡Hasta en un buen número de naciones de América Latina así se hace! Si dudáis, preguntar en Chile, Costa Rica y algunas más.



Del recuerdo


Ambas gráficas corresponden a Estados Unidos. En una entrevistamos al embajador de México en ese país, Arturo Sarukhan, y en la otra por igual  conversamos en Nueva York con un grupo de damas que asistieran a un oficio religioso en recordación a una de sus compañeras fallecida.  

sábado, 23 de julio de 2011


La infidelidad de Jennifer López
Publicidad con violencia es contrasentido
Osvaldo Ríos es un peligro público


Nadie que tenga dos dedos de frente podría pensar que el divorcio entre Jennifer López y Marc Anthony pudo deberse a eso de incompabilidad de caracteres, cual es el argumento más socorrido a nivel general cuando se rompe un matrimonio, lo cual no es más que una pantalla para ocultar con frecuencia le infidelidad de una de la pareja.

El sentido común indica, viendo la aparente decencia de esa separación, y conociendo –por percepción- el temperamento de la boricua, que ésta le ajustó un tremendo cuernazo a su coterráneo. Y todo apunta a que lo hizo con el guapetón actor cubano, William Levi, con quien grabara su más reciente video musical, en el cual aparece con posiciones provocativamente sensuales.

Definitivamente hay que partir con que el motivo del rompimiento ha sido un cuerno, y que no fue de Anthony, porque si hubiera sido de éste la tigresa nacida en el barrio neoyorquino de El Bronx, habría armado tremendo escándalo, abandonando el hogar y llevándose a los gemelos.

Desde ese punto hay que admirar la entereza con que el famoso salcero ha asimilado el golpe, cual lo hacen los buenos boxeadores en el ring.

Reiteramos lo que veladamente dijéramos más arriba, que el 99 por ciento de los divorcios son provocados por infidelidad.

Mencionemos a manera de ejemplo unos pocos adulterios dados en los últimos tiempos entre los famosos: el de Shakira a Antonio de la Rúa con el futbolista Piqué; el de Luís Fonsi a Adamari López; el de Brad Pitt a Jennifer Aniston con Angelina Jolie; el de Arnold Scwazenegger a María Sriver con una sirvienta; el de Mariah Carey a Tommy Mottola con el pelotero Derek Jeter; el de Christina Aguilera a Jordan Bratman con Matt Rutler; el de Jesse James a Sandra Bullock; el de Alicia Machado a su compatriota beisbolista Bobby Abreu; el de Daniel Sarcos a Chiquinquirá Delgado; el de la exreina de belleza chilena Cecilia Bolocco a quien fuera presidente de argentina, Carlos Menem, y los chifles imparables de Luis Miguel a Daisy Fuente, Myrka Dellanos, Sofia Vergara, Aracely Arambula y muchos otros que no pueden ser contabilizados.

Y si nos vamos un poco más lejos, ¿qué tal los cuernos de Priscila al rey del rock n´ rock Elvis Prisley con el chofer de la familia? Los de Isabel Preysler a Julio Iglesias con un empresario y conde español? ¿O los de Winnie a ese ícono mundial Nelson Mandela, mientras éste sufría 25 años de cárcel en Sudáfrica? Infidelidad cometida también con el chofer que la llevaba a visitar al mártir en su injusto encierro.

Pero si a dioses del Olimpo terrenal como los emperadores Julio César y Napoleón sus respectivas esposas, Pompeya y Josefina, les pintaron las cornamentas ¿qué se puede esperar qué ocurra entre los mortales? De Jennifer López lo que hay que admirar es que no se estuviera acostándose con otro mucho antes.

Lo interesante es que en algunos casos señalados los cornudos hasta justificaron o defendieron a sus toreras. Julio Iglesias justificó a la bella filipina diciendo que ella pasaba mucho tiempo sola, y el emperador Julio Cesar incluso fue al tribunal de Roma a defender a su mujer de las relaciones de ella con Clodio. (¡Hay, mami, pégamela, pero no me dejes!)

La conclusión es que de este mundo difícilmente se sale motón, lo más que se puede lograr es que los cuernos sean vacunos y no de alces, múltiples.


Publicidad con violencia es un contrasentido

Jamás la impresión que produce un acto de violencia en una publicidad puede favorecer o motivar a que los potenciales consumidores de un producto, tangible o no, lo utilicen. Solamente puede justificarse un tipo de acción de esa naturaleza, cuando se trata de un accidente para convencer a que la gente adquiera un seguro de vida o de propiedad.

Por eso resulta contraproducente que una compañía de celulares presente un spot donde aparece un diálogo entre una empleada y un posible cliente, el cual es dejado caer abruptamente de manera mecánica desde el falso piso donde está parado, debido a su declaración de que no es un usuario muy activo de los servicios de la empresa. Para la acción la muchacha aprieta un botón debajo del mostrador.

¿Podría una persona no experimentar aprensión, temor, al entrar a un local de esa empresa después de haber visto el anuncio? ¿O por el contrario penetrará a la misma pitando lleno de entusiasmo?

Los personajes creativos de las agencias de publicidad tienen que entender que por muy brillante que les parezca una idea para elaborar una compaña publicitaria, deben primero analizarla en relación con la psicología del segmento del público al cual se van a dirigir.

Un peligro llamado Osvaldo Ríos

Entre las novias y esposas de Osvaldo Ríos, Zully Díaz, Geraldina Fernández, Carmen Dominicci, Kassiana Rosso y Maricarmen Duarte, muchas lo han acusado de haber abusado físicamente de ellas.

Por la Dominicci incluso Ríos fue sentenciado a prisión en Puerto Rico, ya que aquélla probó que cuando eran parejas él la golpeó en varias ocasiones. Y él mismo en más de una ocasión ha dejado entrever que tiene un temperamento difícil de controlar.

Posiblemente a un psiquiatra le sería fácil determinar la proclividad del actor a la violencia observando su morfología, sus rasgos faciales: la configuración de su rostro es la de una persona agresiva, la de un felino.

Así que si las compañías productoras de telenovelas y demás no toman carta en el asunto y lo eliminan de sus elencos, de manera que él se vea obligado a someterse a profundos y extensos tratamientos profesionales, el hombre podría terminar asesinando a una de sus próximas parejas.

A la única que se haya sabido que no golpeó fue a Shakira, de quien fuera su novio en la primera etapa de fama de la colombiana; empero sí se aprovecho de los jugosos ingresos de ella para derrochar dinero y darse buena vida, razón por la cual ésta lo tuvo que soltar en banda.



Del recuerdo:




Momentos de varios años pasados en los cuales dictáramos una conferencia en la Universdiad Tecnológica de Santiago sobre el periodismo en los Estados Unidos, y luego cuando fuéramos entrevistado por el colega Epifanio Rodríguez en su suprograma por el Canal 25, "Asi marcha el Cibao".